Qué dice tu letra de ti
La grafología estudia la escritura para definir qué tipo de personalidad tenemos, es más, hasta el estado de ánimo que tenemos en el momento en el que hemos hecho el escrito. Y no hay suficiente con algunas palabras, el estudio se debe realizar con todo un escrito. Debemos realizar especial atención a las letras «i», «t», «o» y «s».
Os dejamos algunos datos curiosos de las diferentes formas de escribir.
Tamaño de la letra
Grande: suele estar relacionado con personas sociables que adoran tener cierto protagonismo
Mediana: facilmente adaptable a diferentes situaciones
Pequeño: más típico en personas introvertidas, meticulosas y centradas.
Espacio entre las letras
Amplio: expresa libertad y el no querer estar rodeado por demasiada gente.
Estrecho: todo lo contrario, son personas que odian estar solas y les gusta rodearse de mucha gente
Presión y velocidad
Parece que la presión que ejercemos al escribir representa la base de todo. En esta ciencia se establece una metáfora con el caudal de sangre que corre por nuestras venas. En este aspecto, después de examinar el conjunto de un escrito y con un microscopio de gran aumento, se pueden ver ciertos excesos de tinta, que nos pueden indicar un gran malestar o algún tipo de anomalía
Suave: si no hay mucha presión mientras escribimos determina que somos personas más bien sensibles, amigables y empáticas con los demás.
Fuerte: en cambio, si apretamos mucho el boli al escribir indica que somos más serios y comprometidos.
Rápido: se trata de personas impacientes que odian el retraso y las pérdidas de tiempo. Por cierto, son personas muy eficientes.
Lento: indica que son personas organizadas y metódicas
Estos, solo unos cuantos ejemplos, pero hay muchísimas más curiosidades. ¿Te atreverías a analizar tu escritura? Para ayudarte a decidir, hay quien dice que tener más autoconocimiento de nosotros mismos, hace que tengamos más autoestima.